Alejandro Magno y Pericles

        

PERICLES: Si alguna figura trascendió los tiempos gracias a la política esa es sin duda la de Pericles. Nacido en Atenas el 495 a.C.,Hijo de Jantipo, artífice de la victoria helena sobre los persas en la batalla de Micala (479 a.C.), y de Agaristé, sobrina del prestigioso legislador ateniense Clístenes y miembro de la familia aristocrática de los alcmeónidas, Pericles fue discípulo de los filósofos Anaxágoras de Clazómenes, Protágoras de Abdera y Zenón de Elea. Movido por su amor a las letras, financió en el 472 a.C. la representación de la tragedia de Esquilo Los persas, obra con un claro sentido pro- democrático.

Hacia los treinta años, Pericles inició su carrera política dentro del partido democrático de Efialtes y, cuando éste fue asesinado (461 a.C.), asumió su dirección e hizo aprobar por la Asamblea de Atenas una serie de reformas que acentuaban el carácter democrático del Estado ateniense, a pesar de la oposición de la oligarquía.

Nombrado estratego o jefe militar en el 454 a.C., Pericles consolidó la posición hegemónica de Atenas en la Liga de Delos, confederación constituida por diversas ciudades griegas para luchar contra los persas, y utilizó el tesoro de la Liga para construir la Acrópolis.

Gracias a su hábil elocuencia y a su prestigio personal, en el 443 a.C. Pericles se convirtió en la máxima autoridad ateniense, mandato que renovó cada año sin interrupción hasta su muerte (429 a.C.). No obstante, episodios como el sometimiento de la isla de Samos por Atenas (440 a.C.) enturbiaron las relaciones con Esparta y condujeron al estallido de la guerra del Peloponeso (431-404 a.C.), que terminó con la hegemonía ateniense.

 

ALEJANDRO MAGNO ALEJANDRO III De Macedonia): Nació en Pella (Macedonia) el 20 de julio de 356 a.C. Sus padres fueron Felipo II (rey de Macedonia) y Olimpia de Epiro. Desde niño fue preparado para ser un gran guerrero y gobernante. Su formación intelectual estuvo a cargo, entre otros, del famoso Aristóteles.

Tenía 20 años cuando su padre fue asesinado (lo que no dejaba de ser el medio de sucesión mas común en la zona) y Alejandro asumió el poder. Su reinado comenzó reprimiendo varias rebeliones y consolidando el dominio macedónico sobre las ciudades-estado griegas. En el 334 a.C. inició la conquista del Imperio Persa, lo que logró ganando las batalla de Gránico (334 a.C.), Issos (333 a.C.), Gaugamela (331 a.C.) y Puerta Persa (330 a.C.), de todas aquellas batallas se guardan anécdotas, mas o menos legendarias, que nos dan la visión de un Alejandro predispuesto al uso del conocimiento aplicado a la guerra, y la preferencia de la anexión sobre la conquista “pura y dura”. Luego avanzó sobre la India y conquistó hasta el río Indo, pero sus tropas se negaron a continuar más al Oriente.
Muchas son las historias que, con mas o menos fundamento histórico, se han escrito sobre el rey macedonio, sobre todo en lo tocante a su vida personal, lo conocido: es que Alejandro tuvo dos mujeres (nobles persas), y un hijo póstumo (Alejandro IV) que apenas vivió seis años, si mantuvo, o no, otras relaciones se desconoce, aunque ni se puede descartar, ni sería raro o escandaloso en los ejércitos helenos de la época..., pero afirmarlo es, como poco, fabular...
Regresó a Babilonia y se instaló en el palacio de Nabucodonosor II. Aquí falleció el 13 de junio del 323 a. C. Estaba cerca de cumplir 33 años; de nuevo nos hallamos ante un hecho que suscita conjeturas, de momento, imposibles de dilucidar, pues se habla de un posible envenenamiento provocado por su copero. Tras su muerte, sus generales se repartieron el imperio como mandaban los cánones de la época, es decir a guantazos, siendo PTOLOMEO el que lograra una mayor tajada, haciéndose con Egipto y fundando una dinastía que perduraría hasta los tiempos de Cesar Augusto.